Cuando la menopausia llega antes de lo esperado
Seis de cada cien mujeres padecen la llamada menopausia precoz. Se trata de la misma etapa que suele aparecer a los cincuenta años, pero con una importante diferencia: en estas mujeres la menopausia llega antes de los cuarenta. Esta situación supone importantes cambios en su salud: se produce una alteración hormonal que implica que sus ovarios dejen de producir óvulos y desaparezca la menstruación. A pesar de esta situación y gracias a la reproducción asistida, su embarazo es perfectamente posible.
Las mujeres jóvenes que afrontan esta etapa de forma prematura pueden conseguir quedar embarazadas con la ayuda de la reproducción asistida.
En la mayoría de los casos se desconoce el factor que causa la aparición de la menopausia precoz. En otros, sin embargo, ésta aparece porque existe un componente genético –alguna mujer de la familia la ha padecido– o porque la mujer sufre una enfermedad que puede propiciarla, como la diabetes o las enfermedades autoinmunes.
La menopausia precoz también puede afectar a mujeres que padecen cáncer y siguen tratamientos de quimioterapia o radioterapia o bien se someten a una extirpación de sus ovarios, tratamientos todos ellos que pueden perjudicar su fertilidad de forma irreversible. En estos casos, la fertilidad se puede preservar vitrificando sus óvulos antes de empezar el tratamiento, permitiendo así que, una vez superada la enfermedad, la mujer pueda conseguir el embarazo con sus propios óvulos.
Los síntomas, diferentes en cada mujer
Cuando la menopausia aparece, se produce una alteración hormonal que puede conllevar síntomas como la sudoración nocturna y los sofocos. También puede darse una disminución del deseo sexual, sequedad vaginal y pérdida de elasticidad de los genitales.
“Cada mujer es diferente y no tiene por qué experimentar todos los síntomas que acompañan la menopausia”, explica la Dra. Marta Trullenque, del equipo médico de Eugin. “Sin embargo, si tras la ausencia de la menstruación los síntomas no desaparecen y dificultan el llevar una vida normal, es recomendable acudir al médico: él determinará cual es el tratamiento a seguir según nuestra situación”, asegura.
La menopausia precoz y la fertilidad
“Las mujeres que padecen menopausia precoz suelen tener un impacto al saber que ya no podrán tener hijos con sus propios óvulos”, explica la doctora. “Sin embargo, cuando descubren que existe la posibilidad de quedar embarazadas con la donación de óvulos y gracias a la ayuda de otra mujer, la aceptación de la situación y la sensación de agradecimiento es total”, asegura.
Así, las mujeres que sufren la menopausia prematuramente pueden recurrir a la técnica de fecundación in vitro con óvulos de donante para conseguir su embarazo. Independientemente de su edad, seis de cada diez mujeres que recurren a esta técnica consiguen su embarazo.
Superar el impacto emocional
La llegada de la menopausia de forma prematura puede suponer una bajada de la autoestima en la mujer que la padece. “Es una situación que está socialmente aceptada a partir de los 45 años, pero no antes”, afirma la Dra. Trullenque. “La fertilidad siempre se suele asociar a una persona joven y ,con la llegada de la menopausia a una edad tan temprana, estas mujeres se sienten de repente mayores y tienen miedo a que su pareja ya no las encuentre atractivas”, asegura.
Para superar estos miedos, tan importante es seguir un tratamiento para aliviar los síntomas de esta etapa como trabajar para minimizar sus efectos sobre el estado de ánimo. “Es importante hacer un buen trabajo de aceptación de la nueva situación para conseguir el mayor bienestar emocional posible”, concluye la doctora.